Siguiendo la tradición, el 5 de enero nuestro club celebró la Fiesta de Reyes Magos en el Asilo de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados.
Miguel Quintero encarnó a Melchor, José Ramón Illán a Gaspar; y Ignacio Baixauli, debidamente maquillado, al bueno de Baltasar. El cortejo real estuvo siempre seguido por el grupo de tabalet y dolçaina y asistieron muchos rotarios con familia y amigos. Como siempre, un acto entrañable.
En la adoración al Niño acompañaron a los Reyes todo el séquito rotario y muchos ancianos y monjitas novicias del asilo, a la salida hubo lanzamiento de caramelos para todos.
La entrega de regalos (mucho procurados por Velarte) a los ancianos, uno a uno, fue muy emotivo. Los ancianos y las personas que los asisten valoraron el recuerdo y la pequeña fiesta tanto como la bolsa con productos de perfumería y aseo y los turrones. Se hizo un recorrido por todas las instalaciones, incluida la enfermería, para que ningún anciano quedara sin su regalo.
Ya al mediodía, la paella gigante de Galbis que antes de llevar a los ancianos fue aprobada por el séquito real, que dio la enhorabuena a los cocineros. Luego, las monjas llevaron la ración a cada anciano. Los reyes fueron ayudados por unos pajes muy serviciales.
Con la alegría y el acompañamiento de todos los asistentes, se llevó un mensaje de reconocimiento a la gran labor que realizan, día a día, las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que como ellas mismas dicen: “han sido llamadas a hacer de su vida una gozosa donación de amor, en el servicio a los ancianos necesitados”.